Una parte de la intervención neuropsicológica persigue mejorar el conocimiento personal y la búsqueda de alternativas de disfrute tras un daño cerebral adquirido.Entre otros, sabemos que se pueden observar cambios cognitivos tras una lesión de este tipo, por lo que debemos adaptar el material que utilicemos como apoyo a la intervención psicológica cuando así sea necesario.
En el caso de los talleres de “Afectividad y sexualidad” en los que nos apoyamos, entre otros materiales, en la Guía Clínica “Aprendiendo a disfrutar” incluimos varios textos de lectura. Es por ello, que nos aseguramos de que el contenido y la forma de éstos estén adaptados a las necesidades cognitivas y sensoriales de cada participante. Con este fin, destacamos las ideas claves, nos apoyamos en imágenes, así como cambiamos el tamaño o la distribución del material cuando es preciso.
De la misma manera, es habitual utilizar fotografías y dibujos para consolidar la comprensión de las diferentes explicaciones relativas al funcionamiento del ser humano.
Cuando la visión o percepción está comprometida, obviamente la intervención se lleva a cabo de forma oral y/o vivencial (a través del tacto).
El beneficio del uso de imágenes va más allá del apoyo a la comprensión, ya que, para propiciar la participación activa y la autoestima de aquellas personas con un déficit expresivo, también ofrecemos diversas imágenes entre las que poder escoger y comunicar sus ideas.
A modo de ejemplo, en los momentos iniciales a la participación en el taller de afectividad y sexualidad se suele utilizar un texto introductorio para; contextualizar, solicitar una actitud respetuosa y explicar la temática de las sesiones que vamos a ir desarrollando juntos. Conociendo y ajustándonos a las características cognitivas de las personas asistentes ofrecemos este texto introductorio de manera íntegra y, sin mayor apoyo al habitual, u ofrecemos una versión más simplificada y accesible, acercándonos a los criterios de la “lectura fácil”.
Ejemplo de texto con y sin adaptación a déficit cognitivo moderado.
Otro ejemplo de apoyo a la información escrita y verbal, podría ser la utilización de imágenes al abordar los cambios provocados por el sistema hormonal y, más concretamente, los posibles cambios en la menstruación tras un DCA.
Esta información se suele ofrecer en el apartado “Ciclos de la vida. La menstruación” y, como en muchas otras ocasiones, nos servimos de imágenes como refuerzo a una óptima comprensión.
Es también en este momento, en el que solemos exponer los diferentes materiales (copa, compresas, tampones…) para utilizar en los días de sangrado y abordamos sus beneficios o perjuicios según las condiciones motoras (por ejemplo; utilizo silla de ruedas o tengo temblores), cognitivas (se me olvidan las cosas o no estimo bien los tiempos…) y/o conductuales (muestro falta de iniciativa..) de la persona usuaria en combinación con las exigencias del contexto en el que convive.
Ejemplo de fotografías de apoyo a los posibles cambios en la menstruación tras un DCA.