Más allá de la capacidad para procesar los estímulos que llegan de los 5 sentidos, el #procesamientosensorial es uno de los aspectos cognitivos que en ocasiones no se ve evaluado y, por tanto, contemplado en la intervención a pesar de interferir claramente en la manera de relacionarnos con y a través de nuestro cuerpo y con el entorno.
Por su interferencia en la vivencia del cuerpo , en la #identidad y en la #sexualidad considero imprescindible identificar cómo se encuentra la persona que ha sufrido cualquier cambio a nivel neurológico a nivel de; interocepción (… o la percepción de señales internas) ,termocepción ( o como detecta temperatura ambiente y del propio cuerpo), equilibriocepción ( como regula el equilibrio, orientación espacial y movimientos), propiocepción ( o en su percepción de la posición del cuerpo en estático y/o en movimiento y la regulación de su fuerza) o la nociocepción ( o detectar dolor en el cuerpo).
Definidos a grandes rasgos ya que lo importante es no dejar de tener en cuenta cada una de las dimensiones que definen el procesamiento sensorial más allá del procesamiento de los estímulos visuales, aditivos, gustativos, olfativos o táctiles.
Cuando hay conciencia de algún déficit en este sentido la persona identifica sus dificultades a la hora de sentirse hipersensible o sobrepasado con los estímulos externos o, todo lo contrario, necesita mucha estimulación para poder sentir sensaciones en su cuerpo, en cualquier caso, un cambio a conocer y ser comprendido por su entorno.
También podemos escuchar dificultades a la hora de coordinar sus movimientos o regularlos para conseguir un fin concreto mostrando, por ejemplo, falta de control de la fuerza o repetición de movimientos no funcionales o no poder frenar o cesar una acción cuando acaba su finalidad ….. limitaciones y maneras de funcionar limitantes que de no ser comprendidas y atribuidas a este aspecto cognitivo puede provocar malestar, mayor frustración personal, así como rechazo en las vinculaciones afectivo-sexuales previas a la lesión.
Una vez más, no queda otra que comprender las posibles interferencias en la sexualidad de las características cognitivas de la persona. Comprendiendo, aceptaremos y buscaremos nuevas formas de relacionarnos de una forma plena y satisfactoria.