¿Qué tratamos de conseguir incluyendo la afectividad y la sexualidad en la intervención clínica?
Retos del equipo clínico para acercar a un mejor auto-conocimiento y satisfaccion a la persona con mayor diversidad funcional.
Una vez, totalmente, justificada la intervención inclusiva y global en la práctica clínica diaria, nos proponemos alcanzar los siguientes objetivos relativos a la afectividad y sexualidad:
- Explorar las posibilidades de acceso al disfruta corporal y/o genital;
- Valorar si se proporcionan los espacios de intimidad sin riesgos par a la persona en el día a día;
- Contrastar con la persona si hubiera cambios en las manifestaciones eróticas;
- Abordar los posibles cambios existentes en la manera de relacionarnos con nosotros y con los demás;
- Estudiar el tipo de vinculación de pareja con fundamento en la intimidad, el deseo y el compromiso o proyecto común;
- Compensar la interferencia de los déficit mnésicos a través de registrar los momentos de vinculación afectiva reforzante para la pareja;
- Trabajar la regulación conductual, auto instrucciones y/ o uso lenguaje interno;
- Consolidar el conocimiento del cuerpo humano, de ambos géneros;
- Detectar presencia de aprendizajes previos erróneos o creencias falsas respecto al disfrute;
- Determinar los entornos apropiados para el desarrollo de diferentes manifestaciones de tipo erótico o sexual;
- Potenciar la aceptación de la imagen personal actual;
- Potenciar el auto concepto conociendo mi conducta, actual, y el efecto de la misma en las demás personas;
- Trabajar las habilidades sociales y la cognición social implícitas en las situaciones sociales;
- Dar estrategias para detectar y frenar cualquier tipo de acoso o abuso;
- Conocer y empatizar con diferentes modelos de relaciones humanas;
- Detectar los roles y estereotipos implícitos en la sociedad y en cada persona;
- Abordar la capacidad para cuidarnos y cuidar a otras personas;
- Ahondar acerca de la gran diversidad sexual;
- Informar y prevenir de posibles daños psicológicos y de las enfermedades de transmisión sexual;
- Mostrar los diferentes métodos anticonceptivos para poder seleccionar el más adecuado según el tipo de lesión motora, cognitivo y/o conductual de la persona afectada;
- Mostrar los diferentes productos para usar en la menstruación para poder seleccionar el más adecuado según el tipo de lesión motora, cognitivo y/o conductual de la persona afectada, etc.
- Compartir miedos, cambios derivados de la lesión para reevaluar los gustos personales buscando la aceptación individual;
- Indagar sobre opciones de disfrute individualizadas;
- Informar, detectar y utilizar todas las medidas correctoras posibles ante las disfunciones sexuales, en ocasiones, secundarias a la diversidad funcional;
Los aquí mostrados, son parte de los retos que el equipo clínico va seleccionando y objetivando para tratar de aportar una mayor autonomía, normalización y satisfacción en las muchas vidas que se han visto vulneradas por la diversidad funcional.
El disfrute de la sexualidad es un derecho universal, a lo que se suma que los muchos beneficios de este tipo de intervención merecen la implicación y dedicación de las personas dedicadas al cuidado de otras personas.